Límites legales de los detectives privados

El detective privado y los límites que nunca ha de cruzar

El detective privado y los límites legales en sus actuaciones

La legislación protege una serie de importantes derechos de la persona, para el fin de este breve articulo vamos a citar el derecho a la intimidad personal y el secreto de las comunicaciones. Estos derechos han de ser muy tenidos en cuenta por el detective privado a la hora de realizar una investigación. La legislación es muy clara al respecto.

Durante la investigación, en el proceso de averiguaciones y obtención de pruebas el detective privado debe ceñirse exclusivamente al objeto de la misma, despreciando otros detalles o informaciones que llegaran a sus ojos y sean ajenos al objetivo de la investigación, solamente a excepción de aquellos datos que fueran indicios de la posible comisión de un delito. Todas las informaciones y pruebas obtenidas se destinaran exclusivamente a probar la verdad sobre los hechos por los que ha sido contratado. Si se utilizaran otros datos obtenidos durante la investigación que no guardaran relación con el objeto de la misma se estaría vulnerando el derecho a la intimidad de esa persona; por ejemplo un empleado utiliza el horario laboral para encontrarse con su amante. En este caso las pruebas del detective demostrarían que el empleado no cumple con su actividad laboral pero las mismas no deben dar detalle alguno de una posible relación sentimental con una mujer. A pesar de que hallan estado juntos y haciendo manitas en medio la vía pública.

De igual modo en el caso de una investigación exclusivamente por infidelidad tampoco podríamos utilizar instrumentos u aparatos técnicos que pudieran atentar contra la intimidad de la persona. Imagínense una persona que tiene una finca privada de varias hectáreas y creyéndose fuera de la vista de todos cuando está en su intimidad, se le está filmando con un teleobjetivo de largo alcance.

Citemos ahora otro importante derecho que es el  secreto de las comunicaciones. Un bien jurídico que no todas las legislaciones de todos los países cumplen. Se supone que en determinadas ocasiones no queremos que determinadas personas tengan conocimiento alguno sobre el mensaje que estamos comunicando incluso siendo una conversación en un lugar público, o solo queremos que la conozca el receptor o destinatario de dicho mensaje por la razón que sea. Pongamos  un ejemplo cotidiano donde se vulneraría el secreto de las comunicaciones. Si dos personas están conversando creyendo que nadie les escucha  y nos acercamos disimuladamente sin que se percaten de ello y ponemos “la oreja” estaríamos vulnerando el secreto a las comunicaciones, si luego además hiciésemos uso de esa información obtenida divulgándola estaríamos vulnerando otro derecho; la revelación de secretos.

Y recuerden, un teléfono ya sea fijo o móvil, smartphone, whatsaap etc. solo puedo ser intervenido o manipulado por orden judicial. Estos derechos son protegidos por el  legislador penalmente es decir atentar contra ellos conllevan penas de privación de libertad.

Recordemos una famosa cita del filósofo y político ingles John Stuart Mill: “la libertad de uno termina donde comienza la libertad de otro”.

El detective privado es un profesional que sabe como y cuando debe realizarse una investigación con todas las garantías de la ley.